Eliminación de API y EDC de las aguas residuales

La vía más obvia es a través del consumo por humanos y animales, prescrito por profesionales médicos o veterinarios. Cuando se ingiere, sólo se metaboliza una cierta cantidad de cualquier dosis, por lo que el resto pasa al sistema de alcantarillado (o, en el caso de los animales, a las aguas subterráneas y, finalmente, a los lixiviados).
Las depuradoras de aguas residuales (EDAR) habituales no están diseñadas para eliminar los API, por lo que en los últimos ochenta y tantos años, sus concentraciones se han ido acumulando en lo que solíamos denominar agua «limpia».
En todo el mundo, el problema ha empeorado en los últimos 20-30 años con un aumento del uso de antibióticos en países con un enfoque menos regulado de los medicamentos, especialmente cuando puede que no se hayan seguido las dosis y la duración del tratamiento recomendadas por los fabricantes.

La segunda vía es la eliminación inadecuada de medicamentos. Muy pocos ciudadanos son conscientes de los riesgos farmacológicos de tirar a la basura medicamentos recetados no deseados. Muchas personas mayores probablemente lo consideran una cuestión de seguridad únicamente para garantizar que los niños pequeños no los consuman inadvertidamente. En el Reino Unido, esto se remonta a las emisiones de información pública del Gobierno de la década de 1970 que mostraban precisamente eso.
Pero desde el vertido no autorizado de productos caducados hasta la especulación en el mercado gris (e incluso el comercio callejero ilegal de medicamentos de gran demanda) hay muchas formas adicionales en las que grandes cantidades de antibióticos pueden llegar a los cursos de agua.

La tercera vía, en la que Arvia puede ayudar, son los vertidos directos de las plantas de fabricación farmacéutica. Aunque los niveles de contaminantes suelen estar dentro de los límites acordados y, por lo general, las empresas farmacéuticas hacen un buen trabajo de tratamiento de sus aguas residuales, la normativa no es coherente en todo el mundo. Además, con el aumento de la AMR, es muy probable que la opinión pública esté a punto de cambiar.
Hoy en día, muchas empresas pagan por verter a una determinada concentración. Sin embargo, sospechamos que los límites de vertido podrían reducirse pronto ante la presión del público, los inversores o los gobiernos debido a la AMR. Y esto podría ocurrir incluso si la empresa en cuestión está vertiendo o no API que han demostrado ser nocivos. Ciertamente, ahora se cree que los niveles históricamente más altos de vertido de API procedentes de la fabricación de antibióticos en el pasado ponen en peligro la vida acuática aguas abajo.

El ozono es un potente oxidante utilizado para descomponer los compuestos recalcitrantes, pero conlleva importantes implicaciones COSHH y requisitos de mantenimiento para que siga funcionando según lo previsto.
No obstante, es un tratamiento terciario de uso común en muchas plantas farmacéuticas para la eliminación de API.

El CAG (carbón activado granular) es un método de tratamiento establecido que aprovecha la enorme superficie del medio activo. Los principios activos se adsorben en su superficie. Pero para llegar a esa fase, primero hay que producir el carbón activado, un proceso costoso desde el punto de vista medioambiental que implica quemar materiales como cáscaras de coco, carbón, turba o madera.Desde el punto de vista medioambiental, es un despilfarro, ya que hay que retirar el carbón usado y volver a procesarlo o enviarlo a un vertedero. La reposición del medio perturbará inevitablemente los procesos de producción.

Otra alternativa son los sistemas que utilizan la oxidación. El efecto de la dosificación química se estimula mediante electricidad. La electricidad genera radicales hidroxilos que, una vez que «chocan» con el API, lo oxidan descomponiéndolo en gas y agua. Este método puede ser muy eficaz pero, dependiendo de los demás contaminantes de las aguas residuales, puede consumir mucha energía.

Nyex Rosalox™ es un revolucionario proceso de tratamiento de aguas de Arvia Technologies. Es una combinación de dos de los métodos más exitosos discutidos anteriormente – adsorción y oxidación electroquímica. A eso, añade las propiedades únicas de nuestro Nyex™ Media – un medio adsorbente que se regenera al mismo tiempo que adsorbe los orgánicos que está oxidando.
Un producto de más de 30 años de investigación continua por el Dr. Nigel Brown de la Universidad de Manchester en el Reino Unido, los últimos sistemas de tratamiento terciario de agua Nyex ™ están diseñados especialmente para tratar orgánicos recalcitrantes y se pueden utilizar en una variedad de situaciones en una amplia variedad de industrias.